Vive retraída en una lujosa mansión rodeada por un inmenso jardín.
A su retorno, cuando Giorgio confiesa por fin su amor, Micòl lo rechaza, sin revelarle el verdadero motivo: que entretanto ha comenzado una relación con Giampiero Malnate, un joven comunista, amigo de su hermano Alberto y también de Giorgio (en la novela esta relación está solo sugerida, o más bien sospechada por el protagonista).
Cuando descubre la verdad, Giorgio se siente doblemente traicionado: en su amistad y en su amor.
Todo este episodio triangular relativamente corriente se ve envuelto en las dramáticas vicisitudes históricas.
Todos los jóvenes judíos que frecuentaban el jardín de los Finzi-Contini serán arrestados en 1943, salvo Giampiero Malnate, muerto en la campaña de Rusia, y el propio Alberto Finzi-Contini, muerto de enfermedad y sepultado en el ostentoso panteón familiar.