Ésta es la primera película en la que aparece Zovek ante las cámaras y empieza su fama como telépata, hipnólogo, practicante de artes marciales y especialista en actos de escapismo.
La película empieza cuando Zovek se encuentra en un lugar desértico donde estaba practicando la meditación.
De repente, un avión se estrella contra el suelo: Zovek percibe ese suceso gracias a sus poderes extrasensoriales, y sabe que el número de muertos en un accidente aéreo no siempre se corresponde con la cifra oficial.
Al final, Zovek logra rescatar a sus amigos después de haber sido hecho prisionero.
Zovek es perseguido por este y se enfrentan en el sótano de una iglesia en ruinas.