El furgón es una película del año 2003, dirigida por Benito Rabal y protagonizada por Sancho Gracia y Pablo Carbonell.
Como consecuencia de un accidente de tráfico, tres delincuentes de poca monta —un carterista manco ya jubilado, un pobre hombre nacido en la cárcel y que ha pasado en ella toda su vida, y un joven con mala suerte cuya aspiración es tener un taller mecánico— logran escapar del furgón policial que los conduce a la cárcel.
Aprovechando un tren de mercancías, consiguen llegar hasta la costa levantina, donde se esconden en una solitaria mansión junto al mar.
Y, extrañamente también, hasta esta llega Nina, una joven extranjera a quien los tres fugados no tienen más remedio que retener.
Pero tras Nina llegan además unos rusos pertenecientes a la mafia, y los tres delincuentes acabarán involucrados fortuitamente en tráfico de plutonio, en una trama donde nadie es quien parece, ni siquiera ellos tres, quienes en medio de seducciones, trampas y engaños, serán los únicos que actuarán con honestidad.