El Tablazo

[1]​ La cumbre del cerro es un ecosistema de páramo con extensas áreas ocupadas por frailejones, musgos, pajonales, lagunas y caminos veredales.

[2]​ El efecto de la barrera natural formada por la cumbre al detener la humedad atmosférica proveniente de las tierras cálidas del norte, es el de mantener una particular niebla sobre los alrededores del lugar.

Su parte boscosa se encuentra sobre el cerro y es de difícil acceso.

En el cerro el Tablazo se encuentran diversidad de especies naturales entre las cuales se destaca la rana dorada de Supatá,[3]​ las orquídeas y numerosas aves que lo habitan.

Además es un destino concurrido entre la comunidad aficionada al ciclismo de la región y de la capital del país por sus pronunciadas pendientes en tramos tanto pavimentados como destapados.