El Descendimiento de la cruz es un cuadro del pintor neerlandés Rembrandt.
Se conserva en la Alte Pinakothek de Múnich (Alemania).
Rembrandt utiliza el claroscuro para subrayar lo humano del sufrimiento y el carácter detestable de la muerte.
[1] Rembrandt debió conocer la obra que sobre el mismo tema había pintado Rubens para la catedral de Amberes veinte años antes.
La comparación entre ambas obras permite comprender la particularidad de Rembrandt al optar no tanto por una representación de lo divino y sobrenatural, sino de lo terreno y realista.