Aunque existen numerosas técnicas para reducir en lo posible este defecto, lo más recomendable es recurrir a la edición digital, lo que nos permitirá eliminar por completo los ojos rojos.En fotos con flash, a la mayoría de las mascotas los ojos no les quedan rojos sino azules, verdes o amarillos.[1] Los perros, gatos y casi todos los animales domésticos tienen una capa especial reflectante en la parte posterior del ojo denominado tapete coroidal (tapetum lucidum en latín), que mejora la visión nocturna.Los cachorros y los gatitos más pequeños tienen un reflejo tapetal azul hasta que las estructuras en la parte posterior del ojo maduran completamente hacia los seis a ocho meses de edad.Para ello, al momento de accionar el obturador, la cámara efectúa un breve disparo del flash que causa una contracción de la pupila; casi instantáneamente, arroja un segundo disparo del flash, este sí orientado a crear la luz necesaria para sacar la foto.
Efecto solo en uno de los ojos de un gato con
heterocromía
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