En este año la fuerza creciente del nazismo le obligó a abandonar Austria, pues era judío y buscar refugio en Francia, de donde pasó a Estados Unidos (1938), país en el que desarrolló su actividad profesional.
Desarrolló un patrón de conocimiento para entender nuestras emociones y para aprender a controlarlas.
Sostuvo que inconscientemente, percibimos e interpretamos la realidad desde nuestra parte emocional infantil.
Bergler constató la enorme resistencia del mundo académico a sus innovadoras tesis, afirmando que estamos determinados emocionalmente y que nos resistimos a alterar el statu quo psíquico.
Dado que negamos categóricamente nuestros traumas y además los proyectamos en otros, nos resistimos a que nuestro inconsciente tenga una posición tan dominante y manifieste tan maligna naturaleza.