Es considerado como uno de los padres del nacionalismo corso con su hermano Max Simeoni.
Eso provocó el asalto policíaco (1.200 efectivos) con vehículos blindados, por orden del ministro de interior Michel Poniatowski, aprobada por el primer ministro Jacques Chirac, y que provocó dos muertos y un herido.
Por estos hechos, fue condenado a 5 años de prisión pero fue liberado bajo palabra en 1977.
Después del incidente Simeoni se consolidó como uno de los referentes del movimiento corso y se involucró fuertemente en la defensa de la autonomía por vías pacíficas, es uno de los responsables que el movimiento soberanista corso abandonase toda estrategia que no fuera democrática y no-violenta hecho que le convirtió en un símbolo de la paz en la isla.
[3][4][5] Simeoni se estebleció en Bastia y practicó medicina durante muchos años.