Tiene 25 pisos y mide 89 metros,[1] que en su momento representaron una altura significativa para el promedio de la ciudad.
En la actualidad alberga despachos y oficinas judiciales, que llevan el nombre del jurista Hernando Morales Molina.
La construcción corrió a cargo de la firma colombiana Martínez Cárdenas y Cía, asociada con Pablo Lanzetta Pinzón.
[6] La estructura del edificio es en acero remachado y está cimentada en pilones de hormigón.
[3] En el vestíbulo de la edificación el escultor pamplonés Eduardo Ramírez Villamizar realizó un altorrelieve monumental abstracto con figuras curvas sobrepuestas titulado El Dorado.