Esta práctica podría haberse iniciado en la antigua Grecia, pero no han llegado testimonios que lo confirmen.
Durante el Renacimiento en Italia, alrededor del 1450-1600, que poseía características griegas y romanas clásicas llevó en el arte a los estudios de la anatomía humana.
No fue sino hasta la elección del Papa Bonifacio VII que la práctica de la disección se permitió una vez más para el estudio.
[1][2] Muchos pintores y artistas documentaron e incluso realizaron sus propias disecciones tomando cuidadosas observaciones del cuerpo humano.
[3] Leonardo da Vinci, en particular, fue muy detallado en sus estudios tanto que llegó a ser conocido como el "artista-anatomista".