El concepto abarca esencialmente la industria cultural (arte, entretenimiento, diseño, arquitectura, publicidad, gastronomía) y la economía del conocimiento (educación, investigación y desarrollo, alta tecnología, informática, telecomunicaciones, robótica, nanotecnología, industria aeroespacial).
(...) es una economía en la que la gente dedica la mayor parte de su tiempo a generar ideas.
Es una economía o sociedad en la que la gente se preocupa y reflexiona sobre su capacidad de generar ideas, en la que no se limita a ir a la oficina de 9 a 5 para hacer un trabajo rutinario y repetitivo, como se lleva haciendo desde hace años, ya sea en el campo o en las fábricas.
En otros, como las artes, el valor unitario del objeto físico es más elevado”.
[3] Desde hace muchos años se han generado bienes económicos a partir de ideas innovadoras.
Incluyen además toda producción artística o cultural, la arquitectura y la publicidad.
El valor que se les da en la actualidad a las ideas relacionadas con la economía creativa permite tener un panorama más amplio de comprensión a nivel global del crecimiento y difusión.
Como ejemplo están: Walt Disney, ViacomCBS, WarnerMedia, Sony, Vivendi, Comcast, DirecTV, Bertelsmann, y Liberty Media son las compañías que generan más ganancias por venta de audiovisuales.
[12] En el sector de libros y prensa, está como ejemplo Pearson Educación, es la editorial más grande del mundo.