Este excedente de espectro radioeléctrico es lo que se denomina Dividendo Digital.
En concreto, a más baja frecuencia las ondas se progagan, mayor distancia recorren por la misma energía, penetran mejor en los edificios,[1] utilizan equipamiento más barato, y los posibles problemas de salud derivados de la exposición a ondas electromagnéticas serían en principio menores por la menor energía transportada.
Además, el mayor espectro disponible abrirá las puertas a nuevas oportunidades para la innovación en sectores orientados a los servicios de pago como la salud, educación, gobierno y accesibilidad electrónicos.
igualmente, aumentará la competencia entre proveedores de servicios y permitirá una competencia más efectiva en el suministro de los mismos, suponiendo que no existan cárteles.
[cita requerida] En dicho documento se establecieron los parámetros técnicos que facilitan una utilización armonizada y eficiente del Dividendo Digital.
En 2012 se hace público el "Plan Marco de Actuaciones para la Liberación del Dividendo Digital 2012-2014".
En este plan se especifican los distintos planes (despliegue, seguimiento, comunicación, contingencias, riesgos, compensaciones y planificación temporal) para realizar la ordenación del espectro y se establece como fecha de terminación del proceso el 1 de enero de 2014.
En las comunidades con amplificadores monocanales, la subvención varía en función del número de múltiples digitales afectados, en cada demarcación.
En él se liberarán las frecuencias en la banda de los 700 MHz para su uso en telefonía 5G.
Una vez finalizado el primer Dividendo Digital que liberó el espectro a partir de los 800 MHz, cediéndolo a telefonía móvil y sus servicios 4G de pago, se aprobó la llegada del Segundo Dividendo Digital para 2020, por lo que es obligatoria otra resintonización masiva como las anteriores.