Las personas LGBTI en Bangladés se enfrentan a ciertos desafíos legales y sociales no experimentados por otros residentes.
Por otro lado un ciudadano no es elegible para ser miembro del Parlamento si está condenado por un «delito criminal que involucra inmoralidad».
[2] Esa restricción legal también se extiende a cualquier tipo de partido político que defienda los derechos LGBT.
[5] No existen leyes que protejan a los ciudadanos en sus orientaciones sexuales o identidades de género.
En 2003, el más alto tribunal de Australia dictaminó que las personas perseguidas debido a sus orientaciones sexuales podrían ser acogidas como refugiados.