Este enfoque permite un desarrollo más eficiente y especializado en proyectos de gran escala.
Las etapas más comunes en este proceso son las siguientes: En esta fase inicial se define la idea básica del juego, abarcando su género, temática y mecánicas de jugabilidad.
Este enfoque iterativo es crucial para alinear el producto final con las expectativas del público objetivo.
Lanzamiento En la fase de marketing se implementan estrategias para promocionar el juego y aumentar su visibilidad en el mercado.
Este enfoque proactivo es crucial para asegurar la longevidad y la relevancia del título en el mercado.