Para esto, se contrató al ingeniero César Cipolletti, quien recomendó al joven Eliseo Anzorena para la planificación y construcción del futuro dique.
El 6 de diciembre fue inaugurado el dique, funcionando como un dique regulador y nivelador del río, que permitió abastecer 25 000 hectáreas del Departamento Cruz Alta y 10 000 del Departamento Capital con un caudal de 5000 litros por segundo.
[3][4] Con el paso del tiempo, se convirtió la zona en un balneario y lugar de pescar.
Por ello, en los años 60 se construyó un camping en cercanías al dique.
En 1960, durante la gobernación de Celestino Gelsi, el dique fue parcialmente restaurado.