Esta diócesis aparece citada en el Parochiale suevorum, un documento que muestra la organización eclesiástica de la Galicia de la época del Reino suevo, que se data entre 572 y 573.Aparece citada cómo Sedem Britonorum, es decir, sede de los bretones, indicando que le pertenecen las iglesias del interior de los bretones, el monasterio Maximi, y las iglesias sitas en Asturias.La diócesis es posteriormente citada en otros concilios, ya con otros representantes en época visigoda (desde 585 el reino suevo había sido incorporado a los dominios visigodos), en Toledo (IV, VII y VIII).La última mención corresponde al año 675, en el III Concilio de Braga.[1] Compelidos por las invasiones sajonas, grupos germanos que desembarcan en la Gran Bretaña, comunidades bretonas abandonan la isla entre el siglo IV y VII, dirigiéndose básicamente a espaldas galas, donde se asientan en la península de Armórica, que acabará por tomar el nombre actual de Bretaña, por consecuencia de este poblamiento.