Deseabilidad social

De tal suerte, se suele convocar al individuo para un fin que no es precisamente la meta del experimento, o se les solicita ejecutar determinada actividad cuando en verdad es otra inherente a ella el motivo de análisis.

En otras palabras, ¿estas autodescripciones describen rasgos de personalidad o deseabilidad social?

[5]​ Posteriormente Crowne y Marlowe (1960) desarrollaron una la escala de Deseabilidad Social que ha sido una de las más utilizadas, ellos quitaron el extremismo de los ítems para que no tuvieran relación con psicopatología y definieron el concepto como la necesidad de obtener aprobación respondiendo de una forma culturalmente aceptada y lo midieron a partir de afirmaciones a comportamientos que son socialmente aceptables y aprobados, pero que, al mismo tiempo, es relativamente poco probable que ocurran, por ejemplo: “Nunca me ha disgustado intensamente a nadie y comportamientos culturalmente reprobables, sin embargo, son altamente probables que ocurran, por ejemplo : “Algunas veces me gusta chismear”.

Se considera que las personas que se representan a sí mismas con puntajes altos en los comportamientos aprobados y bajos en los comportamientos desaprobados muestran un alto sesgo de deseabilidad social.

Este es, por otra parte, un problema común en los tests: el hecho de poder responder únicamente con una solución predeterminada y no poder complementarla con una opinión subjetiva, lo cual reduce el margen de análisis del individuo.