Todos las vagones eran metálicos, siendo construidos en los Estados Unidos de América por la empresa Budd Company.
[2] La composición iba completa, siendo gran parte de los pasajeros jóvenes veraneantes que regresaban del Algarve.
[2] La locomotora abandonó la vía y cayó en el tramo entre la línea y la pared de la trinchera, arrastando consigo el tender, el furgón y el primer vagón de tercera clase, deteniéndose enseguida; debido al terreno abrupto, el segundo vagón de tercera clase penetró en el vagón caído, destruyendo la mitad de este.
[2] Debido al hecho de no existir ninguna en las proximidades del lugar del accidente, tuvieron que ser los propios pasajeros los que se desplazasen a las estaciones en ambos sentidos del accidente, con el fin de dar la alarma.
[2] Este accidente produjo entre 29 a 34 muertos y cerca de 50 heridos.