Con origen en el séptimo presidente de Estados Unidos, Andrew Jackson, y sus partidarios, se convirtió en la visión política dominante del país durante una generación.
Surgió cuando el Partido Demócrata-Republicano, dominante durante mucho tiempo, se dividió en torno a las elecciones presidenciales de 1824.
Sus rivales políticos, John Quincy Adams y Henry Clay, crearon el Partido Nacional-Republicano, que posteriormente se combinaría con otros grupos políticos contrarios a Jackson para formar el Partido Whig.
Los jacksonianos exigían jueces elegidos (no nombrados) y reescribieron muchas constituciones estatales para reflejar los nuevos valores.
Los jacksonianos exigían elecciones para jueces y reescreveram varias constituciones provinciales para reflejar sus valores.
En el ámbito nacional, ellos defendían la expansión territorial, justificando eso en los términos del Destino Manifiesto.