En 1963 debutó en cine con un pequeño papel en Los que verán a Dios, de Rodolfo Blasco.
En 1965, luego de actuar en Ritmo nuevo, vieja ola acompañó a Tita Merello en Los hipócritas y en 1967, a Jorge Barreiro en ¡Esto es alegría!, de Enrique Carreras.
Ese mismo año integró el elenco de la comedia Villa Cariño, del cual se realizó otra versión un año después de la que él también participó.
En 1981 compuso el personaje de don Carmelo en ¿Los piolas no se casan...?, película picaresca donde actuaron Santiago Bal y Tristán.
y El anticuario, actuando con Narciso Ibáñez Menta, Adolfo Linvel, Selva Alemán, entre otros.