Entró al Ejército nigerino, alcanzando el grado de coronel.
[3] Éste (que había llegado a su vez al poder por otro golpe tres años antes) fue asesinado.
Durante dos días, la incertidumbre política reinó en Níger, ya que el primer ministro, Ibrahim Hassane Mayaki, y varios otros reclamaban la Presidencia.
Wanké tenía muchos problemas de salud, incluyendo enfermedades cardiovasculares y una alta presión arterial.
Finalmente falleció en Niamey, sobreviviéndole su esposa y sus tres hijos.