En el año 1988 se lesionó y no se recuperó para estar en su mejor forma, quedando quinto en los trials estadounidenses (competiciones nacionales de selección) para competir en los Juegos Olímpicos de Seúl, por lo que no pudo acudir.
[2] En el año 1992 dio positivo por cocaína por lo que fue sancionado con cuatro años sin poder competir, de los que sólo cumplió tres después de pedir clemencia.
Cuatro años después se clasificó para participar en los Juegos Olímpicos de Atlanta, pero volvió a dar positivo por la misma sustancia en un control antidopaje siendo esta vez sancionado a perpetuidad.
También estuvo cuatro meses en la cárcel acusado injustamente de robar a una anciana de avanzada edad, finalmente se demostró que era inocente y fue liberado.
[2] Posteriormente reanudó sus estudios, trabajando a la vez como entrenador ayudante en la universidad de Iowa.