Tienen una superficie aproximada de 3.200 m² y un recorrido cercano a los 400 m. Se desarrollan a una media de 50 m bajo la superficie del terreno y crean un vacío de unos 16.000 m³.
Estas salas tienen nombres tan sugerentes como: sala romántica (sala romàntica), sala del lago (sala del llac), castillo encantado (castell encantat), sala de la palmera (sala de la palmera) o cascada sonora (cascada sonora), entre otros.
Las cuevas destacan por la finura y riqueza de sus depósitos calcáreos en forma de estalactitas y estalagmitas, también denominadas espeleotemas por los geólogos.
Además de la ornamentación natural, diversos aspectos han atraído la atención de científicos y naturalistas.
Por ejemplo, durante las obras de acondicionamiento de las cuevas se encontraron restos fósiles de Myotragus balearicus, una especie de bóvido endémico de Mallorca y Menorca, extinguido hace unos 4.000 años con la llegada del hombre al archipiélago balear.