[2][3][4] Durante el reinado de Isabel II fue concedida en numerosas ocasiones tanto en su forma sencilla como pensionada a la suboficialidad y tropa.
[5][6][7] En 1868, tras la revolución denominada Gloriosa fue suprimida y sustituida por la Cruz de plata del Mérito Militar.
La cruz podía también ser concedida pensionada con 10 o 30 reales.
[4] La insignia consistía en una cruz molinada o anclada, con un medallón central.
En ambos clases la cruz se remataba por una corona real, y sobre ella la anilla que la unía a la cinta de la que pendía.