Ciertos especialistas del mercado culpan además al también creciente uso de aplicaciones para teléfonos inteligentes.
Estos hechos afectaron de manera negativa a diversos artistas, especialmente del género pop, como Lady Gaga, Jessie J y Austin Mahone.
Mundialmente la industria ha tratado de impulsar medidas para reducir la distribución de copias no autorizadas y perseguir a los infractores, entre estas la ley Stop Online Piracy Act (también conocida como Ley SOPA), la cual no se aprobó porque varios medios consideraron que privaba a la gente a sus derechos en Internet.
Igualmente, artistas como Beyoncé, Coldplay, Led Zeppelin, Taylor Swift y The Black Keys se han mostrado en contra del uso de servicios de distribución al no publicar sus álbumes en Spotify porque, según su opinión, esto es lo que ha provocado el decline en ventas.
Japón, el segundo mercado musical más grande del mundo, ha sido uno de los principales territorios afectados, donde se han visto pérdidas millonarias de hasta ¥40 millardos (aproximadamente US$365 millones).
[1] En su reporte anual, la International Federation of the Phonographic Industry (IFPI) reveló que durante el año hubo un aumento significativo en las ventas digitales y el streaming, pero una decaída en ventas físicas.
Sin embargo, esto también facilitó la piratería en otros territorios, como Brasil y España, cuyos porcentajes de descargas ilegales alcanzaron un punto máximo superior al 40%.
A fin de evitar pérdidas, en América y Europa se aplicaron medidas legales para combatir la piratería, lo cual provocó leves descensos en su índice.
[8] Mundialmente, se vendieron 1.611 millardos de materiales, lo cual representó un aumento del 6.9% con respecto al año anterior.
[11] Finalmente, se detuvo la aprobación del proyecto al no haber consenso aparente.
Asimismo, «Ai Se Eu te Pego» del brasileño Michel Teló acumuló casi medio millardo de visitas en el sitio.
Con ello, los organismos certificadores empezaron a incluir la distribución entre los requisitos para obtener discos de oro y platino.
[15] Diversos medios dijeron que se debía a la popularidad de sitios como Pandora y Spotify, sin embargo, Horace Dediu, un analista de Asymco, señaló que se debía a las aplicaciones en general, ya que estaban tomando el tiempo de los consumidores y reemplazando otras actividades como escuchar música.
[15] El reportero Ben Lovejoy descartó su teoría porque «la gente frecuentemente escucha música mientras utiliza otras aplicaciones».
Otro género que tuvo incremento en ventas fue el hip-hop, cuyas ventas aumentaron un 2.2%, gracias a Magna Carta... Holy Grail de Jay-Z Y The Marshall Mathers LP 2 de Eminem.
[17] Estos hechos afectaron de manera negativa a diversos artistas, entre estos la cantante estadounidense Lady Gaga, quien generó gran controversia dado que su álbum ARTPOP, lanzado ese año, no vendió lo mismo que sus anteriores trabajos, The Fame (2008) y Born This Way (2011), a pesar de haber figurado entre los diez más vendidos del año con 2.3 millones de copias.
[18][19][20] Otra de las afectadas fue la cantante británica Jessie J, quien no logró repetir su éxito con su álbum Alive.
Este representó el cambio más significativo hecho en la lista desde mayo de 1991, cuando Billboard decidió tomar en cuenta las ventas registradas por Nielsen SoundScan.
[28] Según Knopper, la industria «contaba con el country» para aumentar sus ventas, sin embargo, artistas del género como Jason Aldean, Blake Shelton, Lady Antebellum y Florida Georgia Line vendieron menos de lo esperado, lo cual «pone más presión en Taylor [Swift]».
[34] Por otra parte, en 2014 las ventas de sencillos digitales descendieron por segunda vez en la historia.
En total, durante el 2014, ochenta y dos canciones vendieron al menos un millón de copias, descenso importante considerando que el año anterior 106 canciones lograron la cifra, y 108 lo consiguieron en 2012.
Se mostró además, que solo eran necesarias 500 copias para posicionar un disco entre los cuarenta primeros y poco más de 8000 para ser número uno.
Otra teoría afirmó que era normal ver estos declines durante los meses de agosto por ser la caída del verano.
[37] Previo a ello, ya varios álbumes habían debutado como número uno en el Billboard 200 con menos de 100 000 copias.
[40] Situación similar se vivió en Australia, país que durante el 2013 experimentó una caída en ganancias del 12%, la peor en su historia.
Al igual que en Japón, esto se debió a que el crecimiento de las compras digitales y servicios streaming no fueron suficientes para cubrir las pérdidas por ventas físicas, las cuales se redujeron en 25.5%.
[45] Por esta razón, Yorke decidió retirar su música de Spotify, y Nigel Godrich, su productor, escribió en Twitter que si bien el streaming puede ayudar a los artistas establecidos a generar dinero por sus trabajos pasados, los artistas nuevos están siendo ahogados por los pagos bajos.
[46] El dúo estadounidense The Black Keys no publicó su último álbum en Spotify, y su baterista Patrick Carney declaró que el servicio era «más justo con las discográficas que con los artistas».
[46] Otros artistas veteranos como Led Zeppelin, The Beatles y Garth Brooks rehúsan publicar su música en Spotify.
Por eso pagamos cerca del 70% de nuestros ingresos a la comunidad musical».