Crátera

Una crátera o cratera (del griego κράτηρ) es una vasija cerámica de gran capacidad destinada a contener una mezcla de agua y vino con la que se llenaban las copas;[2]​ los antiguos raras veces bebían el vino puro.

Se llevaba al lugar de la comida y se depositaba en el suelo o sobre una tarima.

El copero (denominado en latín pincerna o pocillator) administraba el líquido con un cucharón o kyathos (llamado en latín cyathus) y llenaba las copas (pocula o calices) de los invitados.

Las cráteras se fabricaban en barro y en metales preciosos y se modelaban con formas distintas según el gusto del artista.

Las formas más extendidas y que se han encontrado en las excavaciones son:[3]​

Crátera de campana expuesta en el Museo Arqueológico Nacional de España . Está hecha en arcilla y es del s. IV a. C. Fue hallada en la necrópolis de Villaricos ( Almería ), en la tumba 52-I y sirvió para depositar los restos de una incineración. Está decorada con figuras de sátiros (divinidad campestre y lasciva), una ménade (sacerdotisa de Baco) y Ariadna en la cara A, y tres jóvenes con himatión (manto) en la cara B. [ 1 ]