Un cortacircuito es un dispositivo que se utiliza en instalaciones eléctricas, para interrumpir el paso de corriente eléctrica en el caso de que la misma excede un valor prefijado y sobrecarga el circuito.
[1] Existen cortacircuitos de dos tipos los térmicos y los mecánicos.
Un cortacircuito térmico o también denominado fusible,[2] en esencia es un elemento conductor de electricidad construido de algún metal blando (por ejemplo plomo) el cual se derrite si la temperatura del material es elevada.
El concepto es que ante una sobrecarga del sistema eléctrico lo primero que falla es e fusible y así se evita se dañen otros componentes conectados al mismo y consecuencias peores.
En un cortacircuito mecánico, el mismo en forma automática corta el paso de corriente cuando detecta, mediante un sistema electromagnético, una sobrecarga en el circuito.