Corso de corsos

Sin embargo, en el siglo XIX, luego de la derrota en la guerra del Pacífico, la élite cochabambina desdeñó todas las fiestas populares, pues atribuía la derrota en la contienda a que Bolivia no era un "estado moderno".

En ese sentido, se decidió "oficializar" el Carnaval, dándole aires europeos.

El Carnaval en Cochabamba mantuvo ese aire aristócrata hace la segunda mitad del siglo XX.

En 1975 los soldados de distintas guarniciones militares del departamento comenzaron a participar, y poco a poco los aires marciales se convirtieron en música carnavalera.

[8]​ El recorrido del Corso de corsos suele ser de 4,5 kilómetros, por las siguiente ruta: avenida Heroínas, San Martín, El Prado y Ramón Rivero.