Vía rápida

Vía rápida se considera a aquella carretera consistente en una calzada única de doble sentido con limitación de acceso y con características que permiten que los vehículos alcancen grandes velocidades en esta.

Si no, se proyecta directamente una primera calzada de autovía.

Contrariamente a lo que se cree, son unas vías muy seguras siempre que se utilizen según su propósito original: carreteras de una calzada con dos sentidos, en ocasiones con un tercer carril para facilitar los adelantamientos, especialmente en tramos de pendiente.

Al contrario que en otros países como Suecia, en España muy pocas de estas vías han sido convertidas en carreteras 2+1, es decir, carreteras con dos carriles en un sentido y uno en el contrario, estando ambos sentidos separados por barreras u otros elementos y alternando el sentido del carril adicional cada varios kilómetros.

El motivo sugerido fue similar al que propició el cambio de nomenclatura en el resto del país, esto es, que "Corredor" induciría a los conductores a correr; aun así, este sigue siendo el término utilizado normalmente tanto a nivel popular como en los medios de comunicación.

Vía Rápida de Tijuana, México
Antigua señalización de las vías rápidas.
Las antiguas vías rápidas son ahora "vías para automóviles".
Señalización en las vías rápidas, llamadas Corredores, en Galicia.
Señalización en las vías rápidas de Portugal.