La película está protagonizada por Klaus Maria Brandauer, Jan Niklas y Gudrun Landgrebe.
A su partida, su madre le inculca una eterna gratitud hacia el emperador Francisco José.
En la academia militar, el joven Redl pronto destaca por su talento, empuje y lealtad a la Corona.
Allí, Alfred conoce a la hermosa hermana de Kristof, Katalin, quien le da una calurosa bienvenida.
Cuando los dos jóvenes visitan un burdel, Redl parece más interesado en ver a su amigo teniendo sexo que en practicarlo con una mujer en su propia habitación.
Sin embargo, Redl suprime su atracción por Kristof y la transfiere, lo mejor que puede, a Katalin, la hermosa hermana de su amigo.
Como oficial al mando, demuestra ser muy exigente y trabaja duro para revitalizar la disciplina de su equipo.
Su esposa, Clarissa, sufre problemas de salud y sigue siendo una figura distante en su vida.
Después de experimentar ira, vacilación y desesperación, Redl finalmente se pega un tiro.
Primero, se presenta a Redl como ruteno, mientras que en realidad su familia era de origen germano - checo.
Redl era homosexual, sin embargo, en la vida real no se vio obligado a suicidarse por este motivo.