Coprolito

Los coprolitos (del griego κόπρος kopros, ‘excremento’, y λίθος lithos, ‘piedra’[1]​) son heces fosilizadas por desecación o mineralización.

[5]​ Fueron descubiertos por Mary Anning[6]​ y descritos por primera vez por William Buckland en 1829.

Una de ellas consiste en tomar imágenes mediante una tomografía axial computarizada (TAC).

[3]​ o microtomografía[9]​ Otra técnica para el procesamiento de estas muestras implica la división en submuestras, rehidratación, deflocuación, filtración, para entonces analizar cada inclusión por separado.

Hasta ahora, se corroboró que la inmensa mayoría de los coprolitos encontrados en distintas partes del mundo, pertenecieron a invertebrados, mamíferos, aves carnívoras y dinosaurios.

Coprolito de un dinosaurio carnívoro encontrado en el suroeste de Saskatchewan .
Coprolito (posiblemente de hiena) del mioceno encontrado en Calatayud , España.