Los Agustinos Recoletos se establecieron en Marcilla (Navarra, España) en el siglo XIX.
La parte antigua del actual Centro Filosófico-Teológico había sido monasterio cisterciense, anexionado a la abadía de la Oliva.
El año 1891 se proyectó ensanchar el colegio, construyendo una nueva ala.
Por las varias dificultades que se presentaron, su ejecución parcial no fue posible hasta 1931, en que se echaron los cimientos del futuro edificio.
La iglesia, que data del año 1783, y que fue edificada según los planos de un monje cisterciense, discípulo directo de Ventura Rodríguez, tiene la soberana belleza de la Restauración Renacentista, guardando la sucinta ornamentación lineal y planos propios de la arquitectura cisterciense.