Iglesia-convento de Santa Teresa
[2] Con motivo de reparar los daños sufridos por el edificio —recibidos principalmente durante un periodo de exclaustraciones del siglo XIX—[3] el monumento ha sufrido dos restauraciones, que comenzaron a llevarse a cabo en 1888 y 1982 respectivamente.La disposición del convento es un tanto extraña, puesto que tiene un propósito particular: su orientación es hacia el norte (y no hacia el este, como es lo habitual), puesto que pretende situar la cabecera del templo en la habitación de Santa Teresa.Por ello, el claustro y las dependencias monásticas se sitúan al norte.En cuanto a la fachada, sigue los rigurosos principios del primer tercio del siglo XVII, mostrando un semblante muy sobrio, aunque comienza a existir cierta decoración y un uso poco correcto de los órdenes, a la que se accede por una triple arcada, continuando el modelo que Francisco de Mora ya había establecido en el convento de San José, en la misma ciudad.En la capilla mayor podemos ver un retablo que pertenece al segundo tercio del siglo XVII.