La contaminación cruzada es el proceso por el cual los alimentos entran en contacto con sustancias ajenas, generalmente nocivas para la salud.
La sangre cruda en algunos casos contiene bacterias que dan origen al síndrome urémico hemolítico.
Por ejemplo, cortar pan con un cuchillo con el que se fileteó carne cruda.
Las personas con trastornos relacionados con el gluten, como la enfermedad celíaca y la sensibilidad al gluten no celíaca, deben llevar una dieta estricta libre de trigo, avena, cebada y centeno (TACC).
Una vez excluido el gluten del domicilio, y salvo errores, las principales fuentes de contaminación radican en realizar comidas fuera del propio domicilio (bares, restaurantes, casas de familiares o amigos, etc.).