El término se utiliza para distinguir el componente de los circuitos integrados y circuitos híbridos, que se construyen de diversos componentes eléctricos en un paquete.
Típicamente se refiere a dispositivos semiconductores.
Se diferencia del circuito integrado y del circuito híbrido ya que estos incorporan múltiples funciones activas o pasivas en un mismo encapsulado.
La miniaturización progresiva e imparable impuesta por la industria electrónica, así como los avances en el campo de los semiconductores llevan a la desaparición gradual de muchos componentes discretos.
Sin embargo, todavía se utilizan en las áreas que requieren altos voltajes o potencias como en la electrónica de potencia, la ingeniería eléctrica, etc ... Su uso se justifica también en la creación de prototipos y pequeñas series o en la educación.