Colin Meads era considerado el mejor segunda línea que dio su país, para algunos el mejor forward que existió y el mejor jugador de la historia debido a su agresivo juego, compromiso, entrega, destreza y su habilidad de manos de un centro promedio.
Desde 2014 era miembro del World Rugby Salón de la Fama.
[1] Fue convocado a los All Blacks por primera vez en mayo de 1957 para enfrentarse a los Wallabies, y jugó su último partido en agosto de 1971 contra los British and Irish Lions, que se encontraban realizando su gira por el país.
También integró los planteles que enfrentaron a estos en 1959 y 1966.
En total jugó 55 partidos y marcó siete tries.