[14] Koonz es conocida por haber documentado el atractivo del nazismo para las mujeres alemanas y comprender su entusiasmo por los nazis.
En Estados Unidos, las mujeres blancas poseían esclavos negros de ambos sexos, y en la Alemania nazi, como nos mostró Claudia Koonz en su desgarrador libro, Madres en la Patria, las mujeres nazis maltrataron y mataron a judíos de ambos sexos.
Al hacerlo, podremos comprender mejor cómo las doctrinas racistas asesinas se infiltraron tan fácilmente en el tejido moral y psicológico del pueblo alemán”.
[24] Un crítico de The Review of Politics calificó a La conciencia nazi como un “libro meticulosamente investigado y apasionantemente escrito”.
[26] Esta fue una época en la que la política racial nacionalsocialista se congeló o, según Koonz, “metastatizó” en tres contextos: la personalidad pública de Hitler, los think tanks académicos y las redes burocráticas.
[27] Durante estos años, la base nazi rabiosamente antisemita fue mantenida bajo control por el propio Hitler y los defensores de un ataque “racional” contra los judíos.
Aunque los alemanes comunes y corrientes deploraban la violencia, las medidas antisemitas que parecían “legales” apenas pasaron desapercibidas.
Además, el gobierno de Hitler acabó con el desempleo, obtuvo victorias diplomáticas y revivió el orgullo nacional.
“Al examinar cómo el nacionalsocialismo movilizó contextos institucionales diversos pero cotidianos para crear una 'comunidad de obligación moral', nos invita a reflexionar sobre..... las formas en que la sociedad contemporánea demoniza, condena al ostracismo y excluye a ciertas clases de personas".