Siendo ya conocidas las necesidades climáticas de las plantas con sus mínimos y óptimos de temperatura, exigencias en humedad, etc., se adjudica a cada localidad un nombre, normalmente el de un cultivo importante, para su periodo cálido (verano) y otro nombre para su periodo frío (invierno).
Además se clasifican los lugares según el régimen de humedad (pluviometría total y distribución mensual) y del conjunto sale un "Régimen Térmico" determinado.
Así por ejemplo Barcelona tiene un invierno del tipo "Ci" de "Citrus" (con un invierno adecuado para el cultivo de los cítricos) y un verano del tipo "O" de "Oryza" (con un verano donde sería posible el cultivo del arroz).
El Régimen Térmico que le corresponde según la clasificación de Papadakis es "Marítimo templado".
En Cataluña, las localidades con inviernos del tipo "Citrus" se extienden por el litoral, mas en el interior suelen ser del tipo Av (avena) y todavía más fríos en alta montaña.