En 1917 se divorcia de Heinrich Studer y conoce al poeta Yvan Goll, el que será su pareja hasta su muerte en 1950.
[2] En sus últimos años alcanzó cierta notoriedad mediática al confesar que había alcanzado su primer orgasmo a los setenta y seis años, con un joven de veinte, aunque la veracidad de dicha historia ha sido puesta en cuestión.
[3] En 1918 debuta como escritora con la colección de poemas Mitwelt y la novela Die Frauen erwachen.
Desde la muerte de su marido, en 1950, Claire le dedicó sus novelas autobiográficas Der gestohlene Himmel (1962) y Traumtänzerin (1971), aunque dichas obras no tuvieron una gran acogida por el público.
En 1976, un año antes de su muerte, se publicó su última obra, tanto en francés como en alemán, La poursuite du vent o Ich verzeihe keinem, que en el año 2003 se tradujo al castellano como A la caza del viento, en la que denuncia las miserias de los grandes prohombres de la vanguardia europea: Celán, Joyce, Jung, Dalí, Breton...[4]