Cinco mujeres en la calle

[2]​ Kirchner consiguió burlar la destrucción de su obra, calificada en 1937 como arte degenerado por los nazis, junto con otras obras como esta.

La arquitectura urbana apenas está esbozada, la influencia de los cubistas franceses y los futuristas italianos le sirve para expresar la decadencia social.

Ahora las retrata satanizadas, como depredadoras, ya que al llegar a Berlín desde Dresde le perturbó ver estas figuras femeninas altivas y confiadas.

Pintó por primera vez prostitutas callejeras, es decir, no prostitutas de burdel que esperan pasivamente a ser elegidas por el cliente, sino mujeres activas, que se mostraban seguras y desafiantes en su búsqueda de clientes por la calle.

En 1914 Kirchner realizó una xilografía a partir de este cuadro que tituló Cinco cocottes, similar pero con otros rostros e invertido en espejo.