Una vez que los pines alcanzan el recorrido o tope de las hendiduras, se giran en sentido contrario ambas superficies de manera que el saliente o pín es guiado hacia una hendidura perpendicular dispuesta para evitar su desajuste y que gracias al resorte o muelle interno, se mantiene bajo presión.
Para su desacoplamiento, el usuario debe realizar el movimiento opuesto, es decir, presionar para que el resorte libere de la posición perpendicular a la superifice macho y giro en sentido opuesto.
El mecanismo de cierre fue desarrollado originalmente para permitir el ajuste rápido del arma bayoneta sobre el extremo del fusil o rifle.
Algunas lámparas de tipo halógenas que trabajan a 230/240 voltios utilizan el llamado cierre B en países que siguen los estándares del Reino Unido, junto con el cierre E, más común en Estados Unidos, Japón y otros países, siendo frecuente su uso para los dispositivos de iluminación en el automóvil y otro tipo de indicadores luminosos.
En las industrias que requieren de la ingeniería y mecánica de fluidos, el cierre en bayoneta es empleado en dispositivos que necesitan un nivel intermedio de estanqueidad del fluido a baja o media presión.