Charreteras (sello)

Los sellos permitieron que los costos postales fueran pagados por adelantado por el remitente, en lugar del receptor, lo cual condujo a un fuerte incremento en el volumen de correo.

Aunque fue rápidamente reemplazado por nuevos diseños, las charreteras demostraron ser extremadamente influyentes y desde entonces han inspirado a varias series de estampillas conmemorativas.

El gobierno belga, inspirado en el ejemplo del sistema postal británico, el cual emitió su primer sello en 1840 (el Penny Black), impulsó la inauguración de un equivalente local.

[1]​ La idea de los sellos postales, que permitiría al remitente pagar por adelantado, fue sancionada oficialmente por Leopoldo I en la Loi apportant des modifications au régime des postes ("Ley para enmendar el sistema postal") del 24 de diciembre de 1847, mientras que el radical liberal y futuro primer ministro, Walthère Frère-Orban, se desempeñaba como Ministro de Obras Públicas.

[2]​ El debate sobre la reforma postal en Bélgica se produjo al mismo tiempo que la reforma postal generalizada, influenciada por el ejemplo británico, en Francia, Baviera y otros lugares.