Tras recibir su primera formación en el estudio paterno, continuó sus estudios junto a su famoso tío, de quien imitó el estilo.
Tanto su estilo como el de su hermano son casi miméticos del maestro.
Sin embargo, fue Cesare el más dotado entre todos los parientes y ayudantes de Barbieri, alcanzando su obra cotas de gran calidad.
Ninguno de sus hijos continuó la profesión; su hijo Giovan Francesco fue el padre del último representante de la saga, Carlo Gennari, pintor aficionado, que falleció en el año 1790.
Alumnos de Cesare fueron pintores como Simone Gionima o Aureliano Milani.