En esta montaña afloran calizas con facies someras del Jurásico inferior (Hettangiense-Sinemuriense, 205 a 195 m.a.)
que se atribuyen a la Dorsal Bética o bien al Subbético.
Al pie del monte, en su cara sur, se encuentra la localidad de Zújar.
De sus laderas brotan aguas termales que a lo largo de la historia han sido aprovechadas en los Baños de Zújar; en la misma zona se encuentra el embalse del Negratín, que rodea el cerro en su zona noroeste.
Cabe destacar en el camino una insólita formación rocosa conocida como Ojo de la heredad.