[1] La censura fue en muchas maneras similar a la ejercida en numerosos países aliados de la Unión Soviética previo a la Caída del muro de Berlín.
Aunque esto parece estar en aparente contradicción con los principios indicados previamente, dado que la implementación debía ser consistente y "de acuerdo a los principios de la constitución" ello le permitió al gobierno recurrir a razones tales como la seguridad nacional, la decencia pública, y otros aspectos mencionados en la legislación nacional para imponer un sistema de censura.
El gobierno controló todas las publicaciones en los medios, las artes, o la cultura.
El censor analizaba el manuscrito desde el punto de vista de la ideología socialista y recomendaba cambios al autor en la medida que lo consideraba necesario.
La primera era la Oficina central para empresas editoras y el comercio de libros (Hauptverwaltung Verlage und Buchhandel, HV), y la segunda era la Oficina de Copyright (Büro für Urheberrechte).