El Cementerio católico de Santa María[1] (inglés: St.
Mary's Catholic Cemetery) se encuentra en Kensal Green en Londres, Reino Unido y tiene su propia capilla católica.
Establecido en 1858, el sitio de 29 acres (120.000 m²) fue construido al lado del cementerio de Kensal Greenn.
Es el lugar de descanso final de más de 165.000 personas de fe católica, y cuenta con un monumento a los soldados belgas de la Primera Guerra Mundial, heridos en combate y evacuados a Inglaterra, donde murieron en el hospital.