Cayo Cestio Galo (en latín, Gaius Cestius Gallus) fue un senador romano del I, que desarrolló su carrera política bajo los imperios de Augusto y Tiberio Miembro de la gens plebleya Cestia, aparece como miembro del Senado en 21, cuando intervinó en el procesamiento de Annia Rufila.
[1] De forma análoga, en 32 denunció en el Senado al ex-pretor Quinto Serveo y al caballero Minucio Termo por su relación con Sejano, caído en desgracia, y, según Tácito,[2] se limitó a recitar la acusación redactada por el propio Tiberio.
Al haber servido bien a su emperador, este propició que fuese nombrado consul ordinarius en 35.
[3][4] Suetonio indica que su conducta moral le había valido una nota de ignonímia de Augusto y que participaba en las cenas libidinosas de Tiberio.
[5] Su hijo Cayo Cestio Galo fue consul suffectus en 42, bajo Claudio y gobernador de Siria entre 63 y 67, bajo Nerón.