Cayo o Gayo Atilio Régulo [a] fue un político y militar de la República romana que ocupó el consulado en 225 a. C. Durante ese año hizo frente a una invasión celta en Italia, pero murió en batalla y fue decapitado.
Fue enviado a terminar con una revuelta en Cerdeña, misión que completó con éxito rápidamente.
A la vuelta a la península itálica con sus legiones, y tras escuchar las informaciones acerca de la invasión celta (o gala) de Etruria, se desplazó enseguida para hacerles frente en batalla.
Régulo, quizás buscando obtener un triunfo por su cuenta,[1] decidió enfrentarse a los galos en Telamón sin esperar la ayuda de su colega consular.
Sería finalmente Emilio Papo quien obtendría el crédito por la victoria y celebraría su triunfo.