Catedral de Mogadiscio

El último obispo de Mogadiscio, Salvatore Colombo, fue asesinado mientras decía misa en esta catedral durante los episodios de insurgencia armada en 1989.

[1]​ Después de algunos años, el edificio fue casi totalmente destruido por los fundamentalistas musulmanes, dejándolo en un estado ruinoso.

[2]​ Periodistas de la BBC tras visitar el lugar en 2012 informaron de que desharrapados buscaban refugio entre sus maltrechas paredes.

Sin embargo, nuevas tiendas habían abierto sus puertas en los alrededores.

Los corresponsales señalaban que el techo del templo se hallaba derrumbado, aunque sus muros aún estaban en pie.