fue una cirujana, precursora de la cirugía, urología y ginecología modernas, activa en Jerez durante la primera mitad del siglo XVI.
[2] Son pocos los datos precisos sobre la vida de Catalina Hernández, salvo que probablemente naciera en Jerez hacia 1490.
Gracias al expediente sabemos que Catalina Hernández curaba un amplio espectro de enfermedades, que van desde las venéreas, tales como llagas, hinchazón, tumores, e infección en los genitales, a otras un tanto dispares, pues se cita que ha sanado a gente enferma de almorranas, micción dolorosa (estangurria), traumatismos, ardores propios del embarazo, dolores articulares causados por las bajas temperaturas, escrófulas o erupciones cutáneas del tipo del usagre.
[1] En definitiva, el proceso se resolvió favorablemente y se le concedió la licencia para ejercer su oficio el 8 de octubre de 1548,[3] y el corregidor de la ciudad "vista la dicha informaçion, dixo que daba e dio licencia e facultad a la dicha Catalina Herrandes para que pueda curar e cure sin pena ninguna de las enfermedades contenidas en su pedimiento y en la dicha información".
Aunque generalmente se ha considerado a la controvertida Elena de Céspedes, nacida en 1545, como la primera cirujana española, puede ahora afirmarse que ya hacia el año 1518 Catalina Hernández ejercía este oficio en Jerez, y que en 1548 contaba con la que parece ser, a todas luces, la primera licencia para ejercer esta profesión en España otorgada a una mujer.